DAMASCO, Siria.- La foto de un niño de cinco años llamado Omran, que resultó herido ayer en un bombardeo contra la norteña ciudad siria de Alepo, ha puesto hoy de nuevo rostro al drama que sufren los civiles a causa del devastador conflicto en el país árabe. Con la cara cubierta de sangre y polvo, el menor aparece sentado en una ambulancia tras ser rescatado anoche de una vivienda bombardeada en el barrio de Al Qatergui.
La imagen es un fotograma de un vIdeo publicado en internet por los activistas del Centro de Información de Alepo, que ya tiene más de 81.000 vistas, informó la agencia de noticias EFE.
El video muestra a uno de los miembros de la Defensa Civil saliendo de entre los escombros de la vivienda con Omran en brazos, entre los gritos habituales de "Alá es grande" y "Qué pecado", en alusión al bombardeo.
El niño, con pantalón y camiseta corta, es sentado en el asiento naranja de la ambulancia, y mira desconcertado a su alrededor. A continuación se toca la zona de la cara herida y observa con sorpresa su mano, que luego restriega contra el asiento para limpiarse la sangre.
A la ambulancia también son subidos otro niño, una niña y un hombre, rescatados de las mismas viviendas en Al Qatergui.
Este caso recuerda al del niño kurdo sirio Aylan Kurdi, cuya imagen ahogado en la playa turca de Bodrum dio la vuelta al mundo y se convirtió en un símbolo de la tragedia de los refugiados sirios que intentan llegar a Europa.
Las zonas orientales de Alepo, en manos de la oposición, son blanco de bombardeos diarios de la aviación siria y de Rusia, en el marco de la lucha por el control de la segunda ciudad del país.